El barroquismo andaluz es un instrumento de poderoso alcance literario para tales motivaciones"... Tal juicio podría resumir el método y el objetivo de VIDA; PASION y MUERTE EN RIO QUEMADO, porque en cada una de sus páginas alienta el trauma, pero tamizado por el tiempo que lo ha convertido en evocación. Al cabo de muchos años de ausencia, la vuelta del protagonista -víctima de la guerra, pero no como beligerante- significa, en una trama esencialmente cargada de simbolismos más que de hechos concretos, el reencuentro con sus propias raíces. A medida que este hombre que vuelve se acerca más el remoto recuerdo de su aldea, va identificándose con sus gentes y con su paisaje; también con las breves historias casi olvidadas que configuran las aristas de un país apasionado, bello y misterioso: el amor, la muerte, el dolor, la esperanza, como constantes de un retablo españolísimo en el que se entrelazan supersticiones, venganzas, rencores ancestrales y generosas entregas. Novela apasionante y ejercicio literario que Manuel Barrios lleva a sus últimas consecuencias.