Más de 80 años separan las dos fotografías que ilustran la cubierta de este libro. Mariano Cañardo, máxima estrella del ciclismo hispano de los años 30, fue el gran animador de la primera edición de la Vuelta (1935). Corredor de porte y estilo más bien nórdicos, "el más belga de los ciclistas españoles" fue el único que pudo plantar cara a los belgas de verdad. Alberto Contador ha marcado a fuego la gran ronda ibérica, desde su primera participación hasta su apoteósica despedida en la etapa del Angliru de 2017. Entre ambas fechas se acumulan las gestas y los héroes, pero también las penurias y los momentos chuscos. Este libro los rescata por primera vez del olvido, en un acto de justicia que ilumina de forma exhaustiva, amena e irónica la trayectoria de una prueba ya mítica que corre paralela a la fascinante, agitada y dramática historia reciente de España.