La permacultura es un sistema de diseño de hábitats humanos sostenibles y a su alrededor se ha generado un movimiento ciudadano con presencia en más de 100 países a lo largo y ancho del mundo. Durante décadas desde la permacultura se han venido dando respuestas creativas a los cambios que se han ido produciendo en las condiciones climáticas locales. Al hacerlo se han ido desarrollando unos conocimientos y experiencias colectivas que resultan de un enorme valor a la hora de afrontar el cambio climático.

Este libro, elaborado por dos grandes académicos, trae esta experiencia desde los márgenes al centro de los debates sobre políticas y de la acción frente al cambio climático. En él se nos explica a grandes rasgos cómo las bases filosóficas de la permacultura y su perspectiva con respecto al cambio climático complementan a las de la ciencia formal y detalladas y accesibles de aplicaciones prácticas partiendo de casos de estudio de diferentes lugares del mundo ilustrados con excelentes fotografías. Los autores también se plantean cómo podrían las respuestas globales sacar el máximo partido de las contribuciones únicas que la permacultura puede hacer.