Esta obra estudia la evolución de la política de seguridad y defensa de EEUU, así como de la forma preferente de actuación del poder militar norteamericano, en el decenio posterior al 11-S. En este crucial periodo se producen cambios trascendentales en el estamento militar norteamericano, cuyo foco pasa de la Transformación militar al paradigma de Contrainsurgencia (COIN), como consecuencia principalmente de su implicación en la Guerra Global contra el Terrorismo y las operaciones militares en Afganistán e Irak.
Pero este proceso tiene lugar en el contexto de unas especiales relaciones cívico-militares, con graves tensiones debidas a las muy costosas campañas COIN que hacen muy difícil la aplicación de la teoría ?normal? de las relaciones cívico-militares. Además, estas relaciones están condicionadas por la particular cultura estratégica norteamericana que conforma la denominada American Way of War.
El estudio de esta evolución desde el paradigma transformacional al de COIN, analizando la influencia que las relaciones entre los máximos líderes políticos y militares norteamericanos y la cultura estratégica de este país ejercen en este apasionante periodo, supone una aportación inédita y de aplicación para mejor entender los constantes e imprescindibles procesos de adaptación de los estamentos de seguridad y defensa en el mundo actual.