Si hacemos un análisis de las sentencias que se han dictaminado durante año 2015 en relación con la mediación familiar podemos señalar varias conclusiones: La primera de ellas es que se han dictado más sentencias con referencia a la mediación familiar que el año anterior. Aún así, siguen siendo un número muy reducido que esperamos que vaya en aumento debido a las reformas legislativas que se han fueron aprobando durante el 2014 en las que la mediación se contempla como herramienta de gran utilidad. En segundo lugar, destaca la aplicación desigual en todo el territorio, con el dominio absoluto de la Audiencia Provincial de Barcelona que muestra un apoyo incondicional a una forma eficaz de resolución de conflictos. Acompañando a la AP de Barcelona se unen las Audiencias Provinciales de Lleida, Zaragoza, Madrid y Pontevedra. La tercera consecuencia viene a resaltar de forma llamativa el limitado campo de actividad a la que se le relega, únicamente para superar discrepancias entre los progenitores y decidir el tiempo que les corresponde pasar con los hijos. Por último, cabe destacar el tono imperativo empleado para derivar a mediación familiar.