Se trata de un libro de viajes y aventuras donde un capitán minoico deberá dejar una carga que consiste en dos mujeres, la reina Altea y Medea, desterradas hacia la lejana Hesperia; y de paso recoger un material que se fabricaba en esas zonas para traerlo de vuelta a quienes lo contrataron para entregarlo a los imperios existentes. Al tiempo que se esboza una serie de leyendas o no, y una historia de amistad entre el capitán y un egipcio. Ciertamente que refleja el paso de una religiosidad claramente femenina por la suplantación de una masculina, en donde se pueden apreciar el cambio hacia unos dioses masculinos con la atribución de las antiguas deidades. En este aspecto revela un tono feminista cuyo factor principal se da en la religión.