Una ubicación geoestratégica privilegiada, puente entre tres continentes, importantes canales marítimos y, sobre todo, abundantes fuentes de energía, han convertido al mundo árabe en un ancestral objeto de codicia por parte de las principales potencias. Y lo sigue siendo en la actualidad. La mayoría de los conflictos de la Posguerra Fría se desarrollaron allí. La expansión de las milicias iraníes, el ascenso del terrorismo internacional, las políticas divisorias aplicadas por Israel y Estados Unidos, las explosiones sociales, en definitiva, todo lo vivido por la región árabe desde el bombardeo de Irak (1991) cuestiona los procesos más elementales de la racionalidad. Tan complejo panorama la convierten en una de las zonas más emblemáticas del planeta, destinada a ejercer un protagonismo central en el futuro de la civilización. Por ello no sorprende la anécdota referida a Donald Rumsfeld, que siempre llevaba consigo un simbólico billete de mil millones de dólares, como recompensa para quien le pudiera aportar una solución alejada de las visiones tradicionales. Este libro se presenta como un intento por entender las realidades culturales, sociales, económicas y políticas de aquella región, así como las constantes intervenciones extranjeras y el conflicto abierto entre viejas y nuevas potencias. Una lucha que no sólo delimitará las fronteras de la región, sino también el poder global durante las próximas décadas.