Pania es un planeta donde sobrevive, desde los tiempos en que su nave se estrellara con cien de sus antepasados, una singular civilización humana compuesta por jóvenes que no logran alcanzar su madurez biológica. Un planeta cuyas dimensiones ignoran, pues nunca han podido abandonar una pequeña isla rodeada por aguas venenosas a las que atribuyen su corto ciclo de vida. La vida en Pania, no obstante, es tolerable. Los adolescentes han conseguido crear una sociedad de bienestar que, gracias al ordenador que pudo ser rescatado de los restos de la nave y al que se refieren como la Gran Mente, conoce la agricultura, la ganadería o técnicas para construir casas. Una sociedad casi utópica en la que cada noche se debaten en asamblea los asuntos que afectan a la vida colectiva. Pero su rutina se ve alterada el día en que La Gran Mente comienza a transmitir una secuencia numérica y uno de los jóvenes, sin ser consciente de que puede poner en tela de juicio algunas de sus más arraigadas creencias, se obceca en descifrar la información que oculta el extraño código. Expediente Pania fue Finalista del Premio Hac