El estudio del poder, y las pugnas por obtenerlo y mantenerlo, es una de las temáticas que ha gozado de mayor atracción y buena acogida dentro y fuera de la comunidad científica. Consciente de ello, el autor ha trasladado la atención en esta obra a un marco de estudio muy concreto: la ciudad de Jerez de la Frontera a finales del siglo XV; lo que le ha permitido profundizar y conocer al detalle los diferentes actores que intervenían en el gobierno de la ciudad. El interés por esta ciudad no es anecdótico ni aleatorio, ya que se trataba de la segunda más poderosa de Andalucía occidental, después de Sevilla. Tanto la monarquía, bajo el control de los enérgicos Reyes Católicos, como la nobleza territorial, liderada por el poderoso duque de Medina Sidonia o el marqués de Cádiz, intentaron, sin éxito, controlar a la élite caballeresca local, que basaba su poder en el prestigio de la guerra fronteriza y los recursos agropecuarios. Ello no evitó que los grupos populares, de manera especial
los más incipientes mercaderes y artesanos, consiguiesen ocupar puestos relevantes en la vida pública. Por tanto, este libro nos ofrece, desde una visión de análisis micro, toda la complejidad de la vida política en el cenit de la llamada Edad Media.