Este libro reúne muchos de los momentos de la historia del cine en los que una canción y una escena se han hecho dueñas de la película creando una experiencia audiovisual inolvidable que nos ha emocionado, nos ha hecho reir, llorar, sufrir o pasarlo bien y, de alguna manera, nos ha llegado al corazón. ¿Quién no recuerda a Gene Nelly cantando y bailando bajo la lluvia, a los niños den la familia Von Trapp recitando las notas musicales por las calles de Salzburgo o a Marilyn cantándonos de forma sugerente desde la gran pantalla? Porque, lógicamente, este recorrido hace muchas paradas en el cine de género musical , pero también en otros momentos en los que los personajes escuchan la canción con nosotros o somos tan afortunados de poder sentirla sin que ellos lo hagan. Así, recabamos además en el Travolta más discotequero en Fiebre del Sábado noche, en el baile roquero de un joven Tom Cruise en Risky Business, en Marty McFly tocando Johnny B. Goode antes de regresar al futuro o en la escena de alfarería más famosa de todos los tiempos al ritmo de The Righteous Brothers en Ghost. El análisis de cad