Esta antología no busca otorgar identidad, marcar terreno, dar voz a grupo alguno. Su propósito es más modesto: reunir textos representativos de la última generación de escritores cubanos, en poesía, narrativa, ensayo y crónica. Un mapa, entre tantos posibles, donde el lector se encontrará en College Station (Texas), en Praga (antes y después de la famosa primavera), en Berlín (tras la caída del muro), pero también en Santiago de Cuba y en La Habana. O Habanas, porque hay varias: la que reconocemos mejor, esas calles llenas de ruina y ruido, miseria y desamparo que nos va dejando en herencia la comatosa Revolución; una futurista, irreal, distópica; y otra del pasado, histórica, pero llena de muertos vivientes. Vanguardista y convencional, cosmopolita y provinciana, cubana y globalizada, onírica y realista, esta literatura es difícil de clasificar. Literatura sin cualidades: no tener atributos es como tenerlos todos. La literatura sigue floreciendo entre el asfalto. (Duanel Díaz Infante)