A lo largo del primer bienio de la Segunda República española, El Noticiero —la principal cabecera católica de Aragón— tildó reiteradamente de «persecutoria» y «sectaria» la política de laicización de la enseñanza que el nuevo régimen trató de llevar a cabo, ante la amenaza que ésta suponía para los intereses educativos de la Iglesia. Adscrito a la tendencia posibilista del catolicismo español y órgano oficioso de, consecutivamente, Acción Nacional, Acción Popular y la CEDA, el diario zaragozano actuó frente a cualquier iniciativa que pusiera coto a la considerable influencia eclesial en el ámbito escolar.
Fariseos de la libertad pone de relieve, entre otras cuestiones, la contradicción del «fomento de un discurso periodístico cimentado en la acusación de sectarismo por parte de un diario católico que, al igual que la propia Iglesia, basaba su actuación en la intransigencia doctrinal». El Noticiero —y el resto del movimiento católico— echó mano de una batería de argumentos entre los que destacaba el basado en el respeto a las libertades democráticas cuando sus posiciones ideológicas eran antiliberales.
Fariseos de la libertad es un libro que revive en el lector la intensidad de la lucha ideológica de los primeros años de la Segunda República al analizar el papel y el discurso de la prensa católica, entendida ésta como instrumento de movilización en el contexto de la pugna por la educación entre clericalismo y laicismo.
Fariseos de la libertad es un libro apasionante que revive en el lector la intensidad de la lucha ideológica de los primeros años de la Segunda República española y nos muestra a las claras cómo muchos —si no la totalidad— de los argumentos esgrimidos por los enemigos de la esculea laica de entonces siguen estando presentes hoy en día, noventa años después, sobre todo en lo referido a «la libertad de elección de las familias».