Tomando como base la documentación epigráfica, esta obra aborda la figura del legionario romano y su entorno social en las provincias occidentales del Imperio (Hispania, Gallia y Britannia) durante los siglos altoimperiales. A través del estudio de los monumentos epigráficos que recogen estructuras sociales, el autor analiza las relaciones creadas por los legionarios en estas provincias, resaltando factores políticos, sociales y militares, tanto a nivel provincial como a nivel imperial, que incidieron en la formación de dichos vínculos. Además de ahondar en los aspectos sociales, este trabajo profundiza igualmente en los aspectos onomásticos, demográficos, jurídicos, militares o religiosos de los individuos presentes en las inscripciones, los verdaderos protagonistas de la historia.