La muŽsica, como arte abstracto, cristaliza en el sonido que emana del instrumento, siendo muŽsica e instrumento el reflejo de una circunstancia histoŽrica indefectiblemente sujeta a las circunstancias sociales y culturales del momento. Cabe preguntarse si es la muŽsica la que se ajusta al instrumento o si ese proceso es inverso. Se trata de una relacioŽn simbioŽtica que histoŽricamente ha generado maravillosas creaciones. El instrumento y su inteŽrprete han sido los canalizadores de un concepto creativo anterior y, para ello, han necesitado explorar y desarrollar en cada eŽpoca los diversos recursos teŽcnicos a su alcance. El hecho es que, a diferencia de otros instrumentos en los cuales el estudio pormenorizado de la teŽcnica instrumental se ha llevado a cabo de manera sistemaŽtica desde el punto de vista de la ejecucioŽn (piano, violiŽn, violoncello?), la investigacioŽn en torno a los procedimientos teŽcnicos y recursos propios de la guitarra ha sufrido una evidente falta de estructuracioŽn. Su intrincada historia, las transformaciones organoloŽgicas y las muŽltiples vicisitudes por las que ha pasado, po