Esta reedición de Amor y pedagogía en la Edad Media, impresa por primera vez en 1989, incluye como prefacio una de las numerosas reseñas que se le dedicaron, la del llorado maestro Alan Deyermond, en la que puso de manifiesto los valores que, a su parecer, tenían mis desvelos y también algunas de sus carencias de fondo y forma, disimulando seguramente las más importantes, como ciertas osadías propias de la juventud, verbigracia la de encararse sin tener rezón con según qué maestros. Se añaden asimismo dos estudios posteriormente publicados, el primero de los cuales puede ser considerado en parte una versión vulgata y actualizada de algunos asuntos apuntados en el libro, y el segundo una nota sobre el uso de autoridades en Celestina.