Edgar Allan Poe, pálido y melancólico visionario, regaló al mundo una nueva visión de lo literario a través de cuentos que, por su angustiosa genialidad y tenebrismo gótico, llegaron a sentar las bases de la novela policíaca y revitalizaron la escritura de terror, además de servir de antecedente para la ciencia ficción. Fue este ambiente lúgubre, junto a su narrativa victoriana, lo que llevó al autor a destacar como el mejor cuentista del siglo XIX, aunque estos rasgos también estuvieron presentes en su producción poética.
En el marco de su desarrollo lírico, ámbito predilecto del autor, aunque postergado —para desgracia de la humanidad— por su escasa retribución, Poe atesora una breve pero hipnótica variedad de poemas entre los que sin duda destaca «El cuervo», publicado en 1845 y que abre el presente poemario, El cuervo y otros poemas. Inspirándose en la edición de 1919, prologada por Rubén Darío, Averso Poesía rescata al Poe más imbuido por la vánitas, que construye mediante sus versos una atmósfera de ensueño de connotaciones oscuras y enloquecidas, donde la impermanencia, la futilidad de la vida y el devenir del tiempo parecen dominar su expresión poética. Pero advertimos asimismo al público lector que, tras el telón de la muerte, se respira en sus poemas un anhelo de belleza. Como sostenía Rubén Darío, en su admiración hacia Poe: «Ha de ver ya el mundo libre de mancha al cisne inmaculado».