Posidonia es precursora de verano y huele a mar mas, a su vez, a la peculiar posidonia que crece en sus fondos. Es la única planta marina con flores y frutos; eso explica su particularidad, la misma que posee el autor, considerándose a sí mismo alga relegada a la orilla, la misma que observaba mientras paseaba por la principal playa de Gijón.

Posidonia es pues la metonimia de la Mar, protagonista femenino de los veranos del escritor, amable mas, a veces, llena de las mismas imprecaciones que lanzaba Poseidón a Odiseo por haber cegado a su hijo.

En el libro la presencia de lo ancestral a través del medio marino cobra relevancia. Parte de un blanco abedul, con el que fue construida la nao literaria, hasta las nubes ennegrecidas que oscurecen el cielo, donde acaba su periplo.

El amparo del recuerdo familiar o la palabra como revolución son otros elementos importantes.