Juan José Márquez es un niño de once años que vive en Laredo con toda su familia. Sus abuelos poseen una hermosa casa heredada de un tío que hizo su fortuna en Cuba y que a él le encanta visitar, sobre todo porque se cuenta que en ella hay una habitación donde vive un fantasma, Aurelio, el hijo del antiguo dueño.


La habitación de los fantasmas narra en primera persona las vivencias de un niño a punto de entrar en la adolescencia. La vida del protagonista transcurrirá plácidamente, con las experiencias propias de cualquier niño, rodeado por sus padres, abuelos, amigos, pero, sobre todo, por la presencia intangible de aquel lejano primo muerto cuyo espíritu reside en una habitación a la que tiene terminantemente prohibida la entrada