¿Cómo se controla la opinión pública? Y lo que es más importante, ¿quién o quiénes tienen interés en ello? Como señala el título de esta obra, crear la opinión y orientarla es la forma más eficaz de convertirse en su director. A través de la sociedad, los valores morales y de la familia, diversos grupos de poder e instituciones como la Iglesia católica, trataron de encauzar los modelos y las formas de comportamiento de los individuos, y, por ende, de la sociedad en la que estos se insertaban. Al final, con todo ello, lo que se pretendía era la reproducción de los esquemas mentales y sociales que debían definir la vida cotidiana de las personas. Para analizar todos estos factores, los cambios y las continuidades en los discursos, qué mejor fuente que la prensa, medio comunicativo que desde la segunda mitad del siglo XVIII y de forma más intensa durante el siglo XIX, fue adquiriendo cada vez mayor protagonismo en el panorama informativo, pero también en la difícil labor que suponía el moldeado de las conciencias. Lo que este libro propone es un viaje por los mensajes que periódicos ibéricos lanzaban hacia el mundo de la opinión con el objetivo de hacer valer sus ideas frente a las de los demás, tratando de convertir su modelo en el hegemónico. Apostando por una relectura de la prensa desde el prisma de la Historia Social, la familia y la sociedad se convierten en los grandes protagonistas de este ensayo de historia.