Yo, que soy tu Dios, te voy a hablar. Escucha. Todo lo que digo debe ser repetido y comentado, porque es mi Voz. Mi voz, debe llegar a todos los corazones y, todos los corazones, deben oírla. No hay más Dios, que Yo. Solo Yo, soy el cielo y la tierra. Solo Yo, soy el Espíritu. El que cree en Mí y me ama, ama el Espíritu y el Espíritu vendrá a él y morará en él. Será como Yo y tendrá el poder, que Yo, delegue en él. Si habla en mi nombre, escuchadle. Si cura en mi nombre, amadle. Lo que él haga, Yo, lo ordeno y, lo hace, porque se lo ordeno. Yo soy el Dios del amor, de la bondad y de la misericordia. Todo el que me ame, tendrá vida eterna y vendrá a Mí. He dicho.