Usando una terminología que quizás a él no le hubiera gustado, hoy podría decirse de Charlot que es un marginado, el más marginado de los marginados. Convertido en el artista más famoso y rico del mundo, su creador, Charles Chaplin, se vio obligado por la edad, o puede que por el pudor, en todo caso por la lógica, a abandonar el personaje de vagabundo a la vez que se daba cuenta de que los papeles de hombre “integrado” también le estaban prohibidos. Debía cambiar de mito pero sin dejar de ser mítico: ¿cómo hacerlo?
Este libro es la historia de esa transformación. Y la escribe a través de varios textos que, a lo largo de los años, analizan la evolución de Chaplin-Charlot al tiempo que dejan entrever la de André Bazin, el gran crítico francés, prematuramente desaparecido, que la persiguió sin tregua contextualizándola a la perfección en la historia y el desarrollo del arte cinematográfico.