El pájaro de raíces podridas: los primeros escarceos amorosos, el ardor de la pasión, la idílica búsqueda de un corazón grande, la consumación del matrimonio, la manzana de lo prohibido, el destierro del ser amado, el perdón como costumbre, la memoria del olvido, la sinrazón de la ausencia, el desafío a la soledad, la última esperanza y ¡la inefable beldad...!


(...) El mundo es en la obra de este autor un territorio inacabable, incompresible, rebosante de misterios que él pretende captar, atrapar a través de imágenes, metáforas, comparaciones que manan de su imaginación y sobre los que el poeta proyecta los significados más ocultos, que el lector deberá interpretar.